La primavera ha llegado, atrás quedó la guerra.
Han crecido
-entre cascotes de metralla-
las cebadas, los trigos,
-ganarán batallas al hambre
de los vivos-
las amapolas han florecido.
Mieses y flores...
homenaje a los muertos
que, en los campos, han caído.
(Cap.II, "Recuerdos con el sepia de los años")
sábado, 6 de noviembre de 2010
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Entre campos de amapolas
ResponderEliminarun homenaje a los muertos.
Que no vuelvan a ocurrir
nunca más tales hechos de
guerra y hambre.
Que pases un feliz fin de semana.
Un abrazo
Ojala que siempre sea así, que florezca y fructifique la tierra y que los muertos y los horrores no sean eternos. aunque siempre sería mejor que la que ya pasó, sea la última guerra.
ResponderEliminarUn abrazo Á.
Lindo Poema, Jorge... Sentida homenaje...
ResponderEliminarBom Fim de Semana
Sí, lindo poema, y coincido con Jacque, sentido homenaje.
ResponderEliminarDejo un fuerte abrazo y deseos porque pases un grato fin de semana.
Qué contradictoria e irónica es la vida, y cruel, según se mire; ella sigue adelante sin importarle cómo y dónde se hace paso.
ResponderEliminarBello homenaje a los caídos.
Un abrazo.
Parece mentira ¿verdad Jorge? Parece mentira que sobre los muertos nazcan flores. Y sin embargo es una esperanza.
ResponderEliminarBello poema.
Un beso.
Queridas Marisa,Ángeles,Jacque,Aída,Mercedes y Carmen, muchas gracias por vuestra visita y por vuestros comentarios.
ResponderEliminarBesos para todas.
Bonito florecer después de una guerra. Resulta paradójico, verdad. Muy bonito... un abrazo.
ResponderEliminarJorge, hermoso poema. La vida sigue, los campos florecen. Te dejo un beso amigo, cuidate.
ResponderEliminarJuanjo la supervivencia así lo requiere.
ResponderEliminarGracias por venir.
Un abrazo.
Muchas gracias, Sandra.
ResponderEliminarOtro beso para ti.
Bellísimas imágenes: el limpio resurgir de la vida en la crudeza del doloroso escombro.
ResponderEliminar¡Enhorabuena!
Un abrazo,
Sole.